Bersaín Lejarza
Sobre una colina de espagueti, había una casa con forma de dos albóndigas y láminas de lasaña, era el hogar de Pastafina Tortellini, una niña de trenzas de fideo atadas con sopa de moño y a quien le gustaba soñar al mojo de ajo. Cuando iba a la escuela, cargaba sopa de letras y cuando se iba de vacaciones la sopa de caracol le acercaba el mar a sus oídos, mientras las almejas no dejaban de sonreír en caldo de jitomate.
Un día sobre su casa de albóndigas y láminas de lasaña vio una lluvia de sopa de estrellas y suspiró de tal modo que por su temperatura interna, exhaló una nube de vapor que dio forma a las ovejas que cuentas antes de dormir.