Raúl Estrada
Publicado en el número 4 del suplemento cultural de revista Propuesta.
Mírame con espadas en los ojos. Sé leer las miradas
donde las aves pierden las plumas y tú sin Dios aquí
bajas la mirada como si las piedras tuvieran boca.
Mírame como hombre del otoño
que se lleva el viento desmembrando sus partes.
La boca es hoja y se va con el aire.
Mírame por dentro donde un abismo existe
y no hay salida por la mirada.
Mírame.
Siente ese sol en el pelo
que araña tu nuca y hace cosmos debajo
de las jacarandas y sus escamas,
los golpes quedos para ti que no entiendes
que las miradas mueren y yo leyendo la tuya
como las plumas de las aves
que dicen nada y significan todo.
Aunque el silencio cree apologías
y desvirtúe el cambio de tus ojos
hacia el infierno.
Das la vuelta, golondrina
tu espalda, otra mirada
ciega lleva mi alma a devorase.
Publicado en el número 4 del suplemento cultural de revista Propuesta.